XXXII JORNADAS NACIONALES DE CARTELES


ELABORACIÓN COLECTIVA... PRODUCCIÓN INDIVIDUAL

Zumbido #11: Trazos a la entrada V

Les traemos la quinta y última entrega en la que analistas practicantes (AP) de la EOL, homologados por la AMP este año, nos cuentan sus experiencias al conformar un cartel a la entrada en la Escuela

 

Cartel: Una experiencia de Escuela
Integrantes: Cecilia Gorodischer, Virginia Gutiérrez, Mariella Lorenzi, Silvina Molina, Andrea Noriega, más-uno: Adriana Laión
Rasgo: Habitar la Escuela a ¿riesgo propio?

Una experiencia donde lo serio no hace grupo
Andrea Noriega (cartelizante en Córdoba)

¿Cómo habitar la Escuela? fue un interrogante desplegado en el pedido de admisión, en ese momento lo que se precipita, es que se trata de un asunto serio, poniendo el acento en la serie "no hay el psicoanalista, solo hay uno, y uno y uno". Así ante la imposible definición del analista ¿hay un modo de habitarla? ¿es a riesgo propio?

Ya transitando la entrada a la Escuela con el trabajo de cartel, me encuentro con una heterogeneidad de estilos, de enunciaciones, de experiencias en relación al lazo con la Escuela que me sorprende. Es la diferencia la que nos reúne cada vez, la más-uno lejos de aunar nuestros rasgos, los mantiene en la torsión necesaria para producir un vacío, provoca el trabajo, donde cada una desde la diferencia absoluta de su propia singularidad, conversa, inventa, produce un saber que no es sin otros, hace Escuela.

El cartel como experiencia de Escuela, me enseña esta vez lo serio de la serie, y es en esta perspectiva de cada uno solo, en su relación con la causa enlazada a la Escuela; que podría decir que habitarla es a riesgo propio, a lo que agrego ¿es también un riesgo a compartir con algunos otros?

 

Cartel: En torno al nacimiento del Campo freudiano
Integrantes: Evangelina Fuentes, Alejandra Guerra, Sergio Higa, Claudia A. Núñez, Patricia Pena, más-uno: Gabriela Grinbaum
Rasgo: Acto analítico y coraje

Autorizarse, acto, coraje
Claudia A. Nuñez (cartelizante en La Plata)

El cartel y las lecturas compartidas con colegas me acompañan desde hace tiempo.

Hubo varios más-uno: de la EOL, de la NEL, en fin de la Escuela-Una, incluso en más de una ocasión me autoricé a encarnar esa función. Y eso produjo trabajo. Eso que rompe con los zapatitos y los narcisismos de las pequeñas diferencias, eso pasó.

J.-A. Miller en el "Coloquio de Disolución", refiere que el aprés-coup reviste cierta cobardía y así reafirma el Acto 10 años después: "Sí, hice lo que hice y respondo por ello" y agrega: "estos son valores que no creo ajenos a la ética del psicoanálisis… en su seminario de La ética… Lacan trata de concluir, nos habla de la traición y no para elogiarla, ni para decir que está permitida", entonces ¿el acto político en psicoanálisis de que estofa está hecho?

¿Cómo pensar la transferencia cuando el Consejo demanda que nos cartelizemos?La Escuela ha calado hondo como para saber que eso… ¡no tardará en producirse!

 

Cartel: La inmersión en la Escuela
Integrantes: Natalí Ivanier, Valeria Massara, Leonardo Rodríguez, Ana Sol Sikic, y Adriana Soto, más-uno: Silvia Elena Tendlarz
Rasgo: Formación del analista a tono con la política de Escuela

Inmersión en la Escuela
Adriana Soto (cartelizante en Buenos Aires)

Confirmar un cartel a la entrada de la Escuela advino acontecimiento para mí. Si bien la transferencia con el Campo Freudiano me orientó a participar de la vida de Escuela como cartelizante desde hace tiempo, este momento da cuenta de una experiencia que anuda mi posición de trabajadora decidida con la inmersión en la Escuela. A la alegría de incluirme en un trabajo singular y con otros atravesados por la misma causa, se le agrega el hecho de compartir el acto de la entrada.

Ya desde nuestra primera reunión se precipitaron efectos de trabajo, la función del más-uno favoreció la elección de los rasgos y la orientación del recorrido, no sin dejar entrar lo que contingentemente se producía.

Mi rasgo me está permitiendo recorrer la experiencia de formación que supone una Escuela, determinada por una política orientada por lo real más que asegurada por programas. Una Escuela que sostiene la pregunta respecto de ¿Qué es un analista?, que garantiza la formación y preserva un vacío.