4 Más uno

NUEVA SERIE #4

Presentación de La 4+1, nueva serie, #3

Luis Tudanca

En lo que respecta a hablar del cartel, ya fue dicho casi todo en la revista, más las dos contribuciones anteriores, de las cuales quiero rescatar dos cosas: Una de Evangelina Fuentes, la expresión "nos amasa", el "amasar" remite al término massen freudiano, que Evangelina usa en esa dirección y que encaja con el texto de Irene Kuperwajs de una manera maravillosa. De lo dicho por Irene tomo dos cosas: su pregunta, si estamos satisfechos con el cartel hoy (que podría haber sido perfectamente el nombre de la noche de hoy), es en lo que me interesa más avanzar y por otro lado lo que Irene llama "el cartel y su danza", el cartel con su danza puede agarrar a cualquier partenaire. Eso me parece también un punto muy interesante para pensar.

Dicho esto, agradezco a Lucas, en primer lugar, porque es quien me llamó para participar en esta noche, y por supuesto al Directorio, a su Directora Gaby Camaly y al Consejo de la EOL por esta invitación.

Leí cuidadosamente la última 4+1. Rigurosa epistémicamente y cuidada estéticamente. Se encontrarán con 37 trabajos, entre los que incluyo la editorial de Lucas como un trabajo. 37 colegas que abordan, lo diré así, "la teoría del cartel", si es que puede hablarse de una teoría del cartel… "sus fundamentos" me gusta más. Pero en esta revista virtual, el cartel se desgaja. Diría, el cartel es desgajamientos… en su danza. Me gustó mucho la metáfora. No es que se desgaja o separa de un todo del que forma parte sino que es en sí mismo desgajamientos, en plural, que no provienen de ningún todo, ni aspira a alguno. La Secretaría de Carteles muestra esto a través de secciones: Editorial, Textos de orientación, El cartel y sus vecindades, Cartel <> Pase, Camino a…, El Cartel en el mundo, Mi primer cartel y De nuestros antecedentes.

Ahora bien ¿hay una teoría del cartel o solo existe una práctica del cartel? ¿o ambas? prefiero pensar que hay "fundamentos" desde los cuales uno se instala en un cartel, y hace lo que puede. Tomo el término fundamentos en el sentido de Freud, que viene de "Pulsiones y sus destinos" y que Lacan retoma en El Seminario 11. Lacan le agrega una perspectiva al Grundbegriffe, ese es el término alemán que encontramos en Freud. Grund, fundamento, begriffe, concepto. Es un concepto en la dirección de aquello que se puede agarrar, no es un concepto en el sentido intelectual-racional, sino que hay pensar en las garras de una animal de rapiña que cuando agarra su presa es imposible que se le escape, salvo que le cortes las patas. Entonces ¿cuántas veces agarramos algo en un cartel? No intelectualmente, no racionalmente sino cuando algo nos toca y produce escalofrío, ahí captamos algo referido al cuerpo. No importa si entendimos algo, no es ese el objetivo fundamental, casi mejor no haber entendido.

Recién ahora estoy en condiciones de formular una pregunta: ¿Por qué cada tanto, en la Escuela, nos vemos en la necesidad de recordar los fundamentos que sostienen la lógica del Cartel? ¿Por qué eso se vuelve necesario una vez cada tanto? Aclaro que no estoy en contra, me parece perfecto que se haga, pero me interrogo al respecto porque si hay esa necesidad, una vez cada tanto, de hacer este movimiento es porque debe haber algo ahí que se vuelve un poco síntoma, entonces hay que interpretarlo y ponerlo al trabajo. Esto ¿está dirigido a los miembros que ingresan a la Escuela? Ellos usan el cartel mucho antes de ser miembros de la EOL, entonces ¿es un recordatorio para renovar su uso? Pero si nos guiamos por la Secretaría de Carteles, se nota que hay un uso firme del cartel en nuestra Escuela, así que no habría, en principio, nada que recordar. Propongo entonces que, así como nos preocupamos por los fundamentos, nos ocupemos de lo contrario, de la "desfundamentación". Así como lo plantea Deleuze, para quien el fundamento es un imparticipable, de allí que hable de desfundamentación. Si pudiéramos, de vez en cuando, desfundamentar un poco.

Miller no tiene ningún problema en hacerlo. Hay una entrevista que le hacen para la revista La cause du désir, número 80, bajo el título "En línea con JAM"[1]; es una entrevista que la trabajaría en la Escuela. Allí él plantea que la ultimísima enseñanza de Lacan es una tentativa de desconceptualización radical del psicoanálisis, en la perspectiva de su puesta fuera de sentido integral y agrega que no se aconseja comenzar por ahí. Podemos empezar por los fundamentos pero, de vez en cuando ¿no podemos arriesgar un poco, proponer alguna desfundamentación? Pero también dice lo contrario, ojo porque Miller dice cosas fuertes en ese texto, por ejemplo: Lacan llegó a pensar que el concepto de "concepto" ya pertenecía a una época perimida e intentó progresar por otras vías. Vean hasta dónde empuja Miller esto porque también dice lo contrario: que los diferentes paradigmas conceptuales se transforman por deformación continua.

No hay una doctrina estándar. Miller llega a afirmar que, con respecto al final de análisis, observa más bien cierto menjunje ese es el término que usa: menjunje. Es decir: no hay síntesis ni antinomia, sino más bien un ida y vuelta entre perspectivas. Sería muy lindo leer La 4+1 desde una perspectiva de desfundamentación, así como la toma Miller en ese texto. Intentaré algunos ejemplos: la rúbrica "El cartel y sus vecindades" es un buen ejemplo, está muy bien elegido el nombre porque el término "vecindad", el uso que le da Lacan, aparece en la sexta clase del Seminario 21. Allí Lacan nos explica que la topología elabora un espacio que parte de la definición de vecindad, que acerca a proximidad y a continuidad. Ahí tenemos todo el tema de continuidad y discontinuidad en psicoanálisis, y allí aparece el término de formación continua que nos viene del texto que comenté de Miller.

Vecindad es lo contrario de frontera, así está planteado. Si no hay la frontera que hace discontinuos los espacios, estamos en la continuidad que propone la vecindad. Y ahí metieron al cartel… hay que sostener eso.

¿Los cuatro conceptos son fundamentales y marcan una frontera con respecto a todos los otros? ¿O son vecinos que ocasionalmente visitan a vecinos de otros barrios? ¿O las dos cosas? No es lo mismo… Es por eso que el Cartel puede ser vecino de la Universidad, que es otra de las rúbricas, lo que no significa que haya ni buena ni mala onda con la misma. Es el problema con los vecinos.

Hay también, sin duda, la historia del cartel. Pero hay que reconocer que el cartel es instante y no tiene pasado ni futuro.

El cartel es un grupo, que no es un grupo. Hay que aceptar esa paradoja. Irene toma eso. No es un grupo, yo lo encontré eso en Lacan, en la "Proposición del 9 de octubre de 1967…"[2], cuando él tiene que definir "grupo", usa el término alemán "massen", que significa masa y que es como traducimos "Psicología de las masas y análisis del yo". Por lo tanto, cuando decimos efectos de grupo, atacar los efectos de grupo, ir en contra de los efectos de grupo, nos referimos al grupo massen y no a cualquier tipo de grupo, porque el cartel no es un grupo massen. No es un grupo que vaya hacia las identificaciones y esa es la diferencia fundamental, que siempre hay que tratar de distinguir. Efectivamente en la práctica del cartel se verifica más de una vez que el cartel termina como "cartel masa" o como "cartel cartel", por decirlo de alguna manera. Con las dificultades en ambas posibilidades, hay que decirlo y no idealizar que una va a ser tremendamente superior a la otra, sino que cada una tiene su dificultad.

Entonces, no es un grupo massen como lo plantea Lacan en la "Proposición…", pero si conservamos el término "grupo" ¿qué tipo de grupo es? No es fácil determinar, delimitar qué tipo de grupo es. No sé si alcanza con recurrir a la lógica del no-todo o, en todo caso, preguntaría ¿qué tipo de grupo conforma el no-todo? No es fácil, yo mismo intenté aproximar la idea de grupo a la de multitud, siguiendo la idea de Spinoza, no la de la filosofía política. Los resultados fueron muy pobres, no avancé mucho por ese lado. Esto me queda como saldo para seguir pensando porque no creo que se resuelvan tan fácil esas cuestiones.

Voy a mencionar acá una frase de Mauricio Tarrab, para retomar la dirección que planteé en la presentación: "Los conceptos están atravesados por los acontecimientos", así como me encantó la frase de Irene y la de Evangelina, me gusto mucho también esta de Mauricio: "Los conceptos […] están atravesados por los acontecimientos, […] por los avatares de nuestra comunidad, por las relecturas permanente"[3]. Esta frase concentra muchas de las inquietudes, de los intereses y perspectivas de los otros 36 autores, por eso la elegí. Agrego: ¿por qué no pensar el cartel mismo como acontecimiento? Diego Tatián, filósofo cordobés, muy spinosista, afirma: "El acontecimiento empírico es siempre incierto y nunca termina de suceder, o bien, su forma es siempre la repetición, jamás el progreso". La noción de acontecimiento proviene de los estoicos y estos explican que el acontecimiento siempre se expresa por un verbo, nunca por un sustantivo o un adjetivo. En Mendoza me di el gusto de decir: "Mendoza escuelea", cuando se creó la Delegación Mendoza de la EOL. Acá voy a decir que, mejor que decir el Cartel es la Escuela tendríamos que decir que el Cartel escuelea. Si aceptamos la lógica del acontecimiento, que es la de la contingencia, debemos aceptar que el cartel existía antes que yo fuera aspirado por él. Sin darme cuenta me vi encarnándolo y, a partir de allí, tratar como afirma Deleuze, de no ser indigno de lo que nos ocurre, de ese acontecimiento.

En psicoanálisis ¿no hablamos acaso de saber hacer ahí con el síntoma? ¿Sabemos hacer ahí con el cartel? Fui Secretario de Carteles en el 2002, hace 20 años y me sigo preguntando ¿cómo saber hacer con el cartel? ¿No es eso un efecto de poesía, como dice otro autor? Eso pareciera, sin ser presentado con esa fórmula, desprenderse de varios textos. Tendríamos quizá una lista restringida de temas relativos al cartel y a su desfundamentación, eso podría ponernos al trabajo.

Hay un artículo de Blanca Sánchez muy interesante, "Marcas de un/una estilo"[4], que permitiría pensar en una clínica no clasificatoria del cartel; y no digo cartel-síntoma porque al afirmar cartel-acontecimiento sería redundante. De allí mi interés por la noción de acontecimiento en relación al cartel. Hay muchos autores que tomaron la idea de que al cartel uno va con su síntoma.

Hay muchos más temas de esta 4+1. ¿El cartel antijerárquico? Es una idea linda pero tendríamos que conversar un poco más sobre lo que queremos decir con antijerárquico.

Siempre habrá lo intrasmisible, lo indecible que Irene subraya mucho. Es así pero cada uno se queda con una porción que te agarró cuando terminaste el cartel. Eso es lo esperable.

Bien, ahora mi propuesta para el próximo número de La 4+1, -ya que este número se sostuvo en la fundamentación del cartel, 37 trabajos que nos explican la fundamentación del cartel, tomando como base sus fundamentos-, es avanzar en la desfundamentación, como lo plantea Miller en la entrevista que mencioné. Y en el sentido de lo que planteé hoy y que tiene el aire de lo que hoy Lucas habló en su presentación: "posibilidades e imposibilidades del cartel."

NOTAS

  1. Existe una versión de esta entrevista en la revista Virtualia, n. 26: https://www.revistavirtualia.com/articulos/234/el-concepto-en-la-clinica/en-linea
  2. Lacan, J. (1967) "Proposición del 9 de octubre de 1967 sobre el psicoanalista de la Escuela", Otros escritos. Bs. As., Paidós, 2012, pp. 261-279.
  3. Tarrab, M. (2023) "Tres para el psicoanálisis: cartel, Escuela y pase", Revista Virtual de Carteles La 4+1, n. 3. Bs. As., EOL, en: https://www.cuatromasunoeol.com/edicion/003.textos-de-orientacion.mauricio-tarrab
  4. Sánchez, B. (2023) "Marcas de un/una estilo", Revista Virtual de Carteles La 4+1, n. 3. Bs. As., EOL, en: https://www.cuatromasunoeol.com/edicion/003.camino-a.blanca-sanchez